Crítica de “The Hunt (La caza)”

Para ser sincero, no es una sorpresa que Thomas Vinterberg haya conseguido fascinarme de nuevo con su última película, “The Hunt (La caza)”  (o “Jagten”, si sois tan insoportables como yo y os gusta la pomposa sonoridad de este sintagma danés). Es un director al que admiro mucho sin llegar al fanatismo, es decir, soy capaz de reconocer algunos de sus errores más evidentes sin tratar de defenderlo a capa y espada, aunque creo que, precisamente, esos “fallos” forman parte de su idiosincrasia como realizador y le dan más personalidad a sus obras.

La que nos ocupa hoy es una cinta ambientada en la Dinamarca actual en un pueblo relativamente pequeño con habitantes que se conocen entre sí, un ambiente que puede resultar claustrofóbico al espectador de una gran urbe y que sirve para engancharlo a la primera. Los que vivimos en esos núcleos rurales donde cada vieja de la calle se sabe los antecedentes de tu familia mejor que cualquier registro público ya nos conocemos demasiado bien cómo funciona y también resulta atractivo ver que en todas partes se cuecen habas. Con semejante título “The Hunt (La caza)”, ya se nos alerta de que lo que va a pasar no es nada bueno y desde el minuto uno estamos prevenidos.

the-hunt-la-caza-vinterbergMads Mikkelsen, nuestro delicioso Hannibal Lecter de la NBC, es el protagonista de esa caza. Lucas es un profesor de escuela infantil divorciado, con un hijo adolescente al que no ve a menudo y una perrita adorable que quiere por encima de todo (o casi todo). En el pueblo tiene a sus mejores amigos y, como es obvio, conoce a la mayoría de los críos de estos. Vinterberg nos deja ver que es un maestro entrañable que no duda en darlo todo por entretener a sus chicos y que de veras le gusta lo que hace, hasta el punto que, digamos, actúa de la misma forma en su día a día cuando cuelga el “batín” de profe. Y esto es lo que va a pasarle factura. Lucas es demasiado amable y servicial con los chicos, en especial con la hija de Theo (Thomas Bo Larsen, que ya ha colaborado otras veces con Vinterberg: “Querida Wendy”, “Celebration”), la pequeña Karla. A partir de las palabras imprecisas y ambiguas de la niña, la comunidad del pueblo se pone en contra de Lucas, hasta entonces un aceptado y respetado miembro. La caza ha empezado.

Y este, a grandes rasgos, es el argumento principal de “The Hunt (La caza)“. Aunque su nombre remita al deporte, no es una película con ritmo vertiginoso donde el protagonista lucha fieramente contra la injusticia impuesta a contrarreloj para aportar pruebas de última hora en un juicio donde lo tiene todo en su contra. No. Thomas Vinterberg opta por la desesperación de la calma, el reflejo de la realidad y los compases que marca ésta. Hay días malos y hay días peores, pero no en todos ocurren cosas extraordinaria y a veces simplemente nos recreamos en el destrozo psíquico que sufre el personaje de Mads Mikkelsen, en cómo la duda lo va corroyendo a él y a sus relaciones más personales, en cómo la ponzoña se apodera de cada uno de los rincones de su pueblo y lo que antes era admiración se convierte en asco por el testimonio falaz de una niña que no tiene las cosas claras. Grande el momento del supermercado, grande la dolorosa venganza que se cobran los vecinos, grande el hijo, grande hasta su mejor amigo, Theo, el padre “más” afectado.

En “The Hunt (La caza)” no se indaga, no se llega hasta el fondo de la cuestión, no hay investigación del CSI. Hay un mensaje claro al respecto y es que la Verdad (sí, con mayúscula) importa un bledo porque la Duda (también con mayúscula) ya ha sido sembrada y Lucas cargará con ella toda la vida. Aun así, el director nos deja caer dos o tres pistas clave para que nosotros, y solo nosotros, sepamos si Lucas es un asqueroso o un hombre acusado injustamente.

Entiendo que la película pueda ser un poco pesada para el espectador que está acostumbrado a otro tipo de cine, a otros ritmos, a otras resoluciones, pero es una joya del cine europeo, concretamente del danés, que no debe ser pasada por alto. Propone una reflexión tramposa, una invitación a la introspección y saca los colores a un tema que siempre está de actualidad. No va a juzgar, no condena: muestra. “The Hunt (La caza)” es puramente referencial. No hay abstracción que valga (eso es cosa del espectador, si acaso).

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Me gustaría mucho que compartierais vuestra opinión si habéis podido disfrutar ya de la caza del profesor, incluso si queréis explicar algún simbolismo que encontréis interesante (como la escena del final; tan buena que se explica por sí sola, aunque deja con ganas de más), la fotografía, la lentitud o también aquellos obstáculos que a mí se me han pasado por alto o algún reproche. Lo que sea.

35 Comments

  1. Mannie abril 21, 2013
  2. Larry abril 21, 2013
  3. Antoni Kirchner abril 23, 2013
  4. Norb Rossi mayo 4, 2013
  5. Yess Azh junio 9, 2013
  6. Hanna junio 28, 2013
  7. Jaime julio 27, 2013
  8. PatoDry agosto 2, 2013
  9. Javier Aguayo Rubio agosto 23, 2013
  10. Victor Cálcena agosto 26, 2013
  11. Julian Garcia Balaguer septiembre 10, 2013
  12. bananon septiembre 13, 2013
  13. Luciana Villafañe septiembre 24, 2013
  14. Agustina Esponda septiembre 25, 2013
  15. Jonny octubre 6, 2013
    • Larry octubre 7, 2013
    • Sara mayo 22, 2016
  16. Jorge Villagra octubre 21, 2013
  17. Iván Granados Tejero octubre 27, 2013
  18. Nadereeh noviembre 3, 2013
  19. Eder Macias diciembre 16, 2013
  20. VVH enero 8, 2014