La triste noticia nos sacudía esta mismA mañana. Manolo Escobar, voz y rostro de nuestro país fallecía víctima de la larga enfermedad contra la que llevaba luchando casi tres años. El actor y cantante había decidido abandonar los escenarios en noviembre del pasado año para centrarse en su familia y, sobre todo en la lucha contra la efermedad que ha acabado por arrebatárnoslo a sus 82 años. Mucho se puede decir sobre uno de los artistas con más carisma y talento que ha dado España, pero en ningún caso sería suficiente para honrar a tan ilustre y querida figura.
Polifacético donde los haya, sus más de sesenta años de carrera nos han regalado una veintena de películas donde el genial artista ponía de manifiesto sus innumerables talentos. Esto unido a innumerables temas musicales del calibre de “Que viva España”, “Mi carro” o el “Porompompero” hace de la figura de Manolo Escobar algo más que un artísta: Un auténtico símbolo de nuestra cultura popular.
Las canciones de Manolo Escobar las han cantado nuestros abuelos, nuestros padres y nosotros mismos. No hay fiesta o celebración que se precie donde los temas del artísta andaluz no suenen. Desde hace décadas, donde hay alegría, hay Manolo. Así ha sido y así seguira siendo porque su voz, sus gestos y su afable sonrisa siempre nos acompañarán. Te vas, Manolo, pero solo un poquito. Te vas para para convertirte en mito y leyenda de nuestra cultura, pero puedes ir tranquilo porque seguiremos emocionandonos con tus películas y celebrando con tus canciones. Buen viaje, viejo amigo.
Grande Manolo.. Muy grande.
Grande Manolo.. Muy grande.