Hace una temporadita descubríamos que Ben Affleck tomaría el relevo de Christian Bale en el papel de Batman, lo que generaba una tormenta de reacciones sin precedentes en contra del popular actor y director. Mucho ha llovido desde entonces, y la tendencia parece haber cambiado claramente. El enorme esfuerzo por alcanzar el tono físico y el aire oscuro de Bruce Wayne mostrado en los primeros tráilers de “Batman v Superman: El amanecer de la Justicia” provocaban que el público optase por darle una oportunidad, mientras que en Warner se mostraban encantados con el trabajo. Hasta tal punto llegaría la satisfacción en la compañía, que incluso ofrecían al intérprete la posibilidad de protagonizar, escribir y dirigir la nueva cinta del hombre murciélago en solitario. Algo que le va a suponer al intérprete un buen esfuerzo…
Pese a que su vida profesional atraviesa un gran momento, lo cierto es que la vida privada de Ben Affleck vive una de sus peores rachas. Su reciente divorcio de Jennifer Garner se ha convertido en la comidilla de toda la prensa amarillista y los enormes problemas vividos han acabado por salir a la luz pública entre montañas de rumores que apuntaban a los excesos del actor.
Nosotros no sabemos si a Ben Affleck le gustará la cerveza más de la cuenta o si será un fiestero descomunal, como muchos medios han apuntado. Lo que está claro es que estos meses le han pasado factura a un actor que pronto tendrá que volver a enfundarse el traje del caballero oscuro para “La Liga de la Justicia”. Mucho trabajo de gimnasio y dieta le queda por delante si quiere seguir manteniendo la talla de Bruce Wayne…