Rey es lo mejor que le ha pasado al universo “Star Wars” desde la trilogía original. El personaje de Daisy Ridley irrumpía como un soplo de aire fresco en el filme de J.J. Abrams, convirtiendo a la intérprete en una de las más cotizadas del momento. El problema es que la fama tiene su precio, y la joven ha pasado a encontrarse en el centro de las miradas de millones de personas. Suena guay, pero lo cierto es que muchas de ellas no son demasiado amables…
Tiene 23 años y, evidentemente, es una chica menudita. Como no podía ser de otra forma, las actrices siempre tienen que defender su talento, pero también su físico. Por un lado u otro acaban siendo juzgadas por su apariencia, lo que no ocurre con intérpretes masculinos. Así, la buena de Ridley se encontraba en las redes sociales con infinidad de comentarios que la atacaban por vender un canon de belleza “poco realista entre mujeres jóvenes”. Eso por no mencionar las críticas a su falta de curvas. No es de extrañar que la chica haya decidido defenderse con rotundidad:
“Lo que es raro es que La mayor parte del tiempo, veo mensajes preciosos de gente de todo el mundo. De gente que se identifica en algo con Rey que no habían encontrado antes en otro personaje femenino. Gente cuyas hijas ahora piensan que pueden hacer cosas sin la ayuda de un hombre pero que tampoco se avergonzarían de pedirla. Gente a la que le encantó que El despertar de la Fuerza” tenga muchos personajes femeninos increíbles. Es más hiriente continuar criticando a otras mujeres que SER una mujer, SER un personaje, SER quien quieres ser”.
Soy una chica normal en unas circunstancias extraordinarias, como Rey. No voy a pedir perdón por mi aspecto, lo que digo y cómo vivo mi vida porque lo que está ocurriendo dentro es mucho más importante y estoy luchando para ser la mejor versión de mí misma, incluso si me tropiezo por el camino. Parece apropiado que se me etiquete en esto un día después de recibir comentarios misóginos en mi post de #IWD. Para todos aquellos que celebráis por los demás, que celebráis por los que queréis, que os queréis a vosotros mismos, que trabajáis duro, que sois buenos, gracias por vuestro continuo apoyo y el cariño por las redes sociales. Para aquellos que tienen algún problema con ALGUIEN en la vida, sea alguien que conozcáis o no, recordad esta expresión: Si no tienes nada bueno que decir, no digas nada. La amabilidad no va a curar al mundo de todo este espanto, pero es un buen lugar para empezar”.