Nadie se lo esperaba. Mientras nuestra desesperanza va en aumento al ver como la posibilidad de una tercera temporada de “El ministerios del tiempo” es cada vez menos, otra de las grandes series de nuestra televisión anunciaba su final para sorpresa de sus miles de fans. “Vis a Vis” se termina esta misma semana.
Tras dos temporadas, parece que los datos de audiencia no han convencido demasiado a los responsables de Atresmedia, optando por concluir este drama carcelario que se convertía, indudablemente, en uno de los trabajos más acertados y prestigiosos de la ficción nacional. Toda una pena.
Como viene siendo habitual, la calidad del producto ha sido insuficiente para salvarlo de la quema. Cierto es que no está del todo mal ver como termina una serie antes de empezar su declive, lo que es demasiado habitual. El problema es que todos sentimos que a Macarena y compañía todavía les quedaba mucha tela que cortar, ya que la serie se encontraba en su mejor momento. En cualquier caso, quedémonos con esa idea y no con la sensación de que unas audiencias por debajo del 15% le han costado caras. Mañana mismo será el desenlace de la sensacional serie.
Una pena.Cierto que está segunda temporada se les estaba yendo,en mi opinión,un poquito de las manos, y había muchas cosas demasiado inverosímiles,pero desde luego le da mil vueltas a chorradas costumbristas y de humor facilón estilo aquí no hay quien viva y sandeces por el estilo.
Pocas series tenían además un elenco de actores, sobre todo actrices, con interpretaciones de tanto nivel.
Todo por la obsesión de las audiencias.Señores,que hay gente que vemos las series por Internet,en sus propias plataformas, en día distinto al de su emisión¿Nosotros no contamos?
Hola, estoy totalmente de acuerdo en todo lo que has escrito. España tiene demasiadas series chorras, las cuales ofrecen siempre lo mismo; para una serie buena que hay, con actores de primera, muchas tramas,etc. Van y nos la cancelan.
Esto es alucinante…se cargaran el final por quererlo resolver todo deprisa y corriendo, o sinos lo contrario, por dejarlo todo sin resolver.
Una gran decepción.