“Fui suicida. No podía lidiar más con eso. Me di cuenta de qué afortunada y privilegiada era, pero todo lo que quería era morir. Me sentía tan culpable por eso y me odiaba por eso… y era un círculo. No quería existir más. Quería que cada molécula de mi cuerpo se desintegrara. Quería morir”.
Así es Cara Delevingne, todo un torbellino de intensidad. Pese a tener solo 23 años, lo cierto es que a esta británica ya le ha dado tiempo a vivir una vida realmente intensa. Lleva años desfilando para marcas tan prestigiosas como Dolce & Gabbana, Óscar de la Renta o Moschino, lo que la convertía en una de las modelos más prestigiosas del planeta. según ella, todos estos trabajos los afrontaba con el firme objetivo de llegar a ser una estrella del cine, lo que parece haber conseguido gracias a filmes como “Ciudades de papel” o “Escuadrón Suicida”.
Ahora, Delevingne ha querido desnudarse por dentro y por fuera para las páginas de Esquire. En ellas habla de la depresión que le diagnosticaban con 16 años y de cómo retomaría su vida a lo grande tras abandonar la medicación. Todo ello mientras nos regala un desnudo de esos que hacen comprender por qué los grandes diseñadores querían ese cuerpo para sus prendas.