“Escuadrón Suicida” no está tan mal. Se hace imprescindible comenzar apuntando este detalle, ya que parece que la cinta de David Ayer se un desastre absoluto. Si un problema tiene, es que el resultado está muy por debajo de las expectativas, pero hay que decir que estas eran muy elevadas. Varios son los elementos del filme que no han resultado acertados, lo que ha terminado por lastrar el resultado final. Todo ello nos apena profundamente, ya que lo tenían todo en su mano para haber firmado un filme magnífico.
Si un elemento se había convertido en principal dentro del éxito de “Escuadrón Suicida” en los meses previos a su estreno, ese era la presencia del Joker. Convertido en leyenda por los descomunales trabajos cinematográficos de Jack Nicholson y Heath Ledger, el sensacional Jared Leto se encargaba de dar vida a un personaje idolatrado por el público. De ahí que muchas miradas se centrasen en su figura.
Pues bien, la cosa no ha salido tan bien como se esperaba. Da la sensación de que el trabajo de Leto es inmenso y de que ha conseguido darle otra vuelta de tuerca al Joker, pero hablamos de un personaje de demasiado calibre como para reducir su papel al de la ardilla de “Ice Age”. Es un mito de los cómics, una leyenda del cine. Se hace imprescindible gestionarlo como tal. No podemos lanzar secuencias desordenadas o presentarlo de forma torpe y prematura.
Sinceramente, estamos convencidos de que Jared Leto puede ser un gran Joker, pero un buen guión es imprescindible para ello. “Escuadrón suicida” usa el nombre del guasón en vano, lo que resulta inadmisible. Afortunadamente, Ben Affleck parece ser el tipo capaz de rescatar al personaje para la causa. El nuevo Batman es demasiado importante y tiene demasiado poder como para que los responsables de Warner Bros le impongan decisiones. Como ha demostrado siempre, su guión se desarrollará con la tranquilidad adecuada y será brillante. Confiamos en ti, Ben.