Tras una larga temporada aislado en una isla desierta, Hank encuentra compañía en el flatulento cadáver de un joven que el agua ha traído hasta la orilla. Poco a poco, el náufrago y el fiambre desarrollan una hermosa amistad. ¿Os suena? Pues claro, llevamos varios meses hablando de Swiss Army Man. Desde su irrupción en el pasado Festival de Sundance, los titulares generados por el filme no han dejado de sucederse. La película de Dan Kwan y Daniel Schinert lograba el aplauso de parte de los asistentes al evento, pero también lograba que muchos abandonasen la sala. Extraño caso…
Sin embargo, Swiss Army Man es mucho más de lo que parecía. Sin lugar a dudas, nos encontramos entre los defensores de un filme pese a su burda y absurda apariencia, esconde un cierto lirismo que consigue seducirnos con su singularidad. De hecho, el fallo del Festival de Sitges no podría habernos alegrado más. El premio a la Mejor Película y el galardón a Mejor Actor para Daniel Radcliffe suponen un importante espaldarazo para uno de esos proyectos que merecen buena suerte sólo por su riesgo.
Swiss Army Man merece mucho la pena. Hasta ahora, su prensa no había sido todo lo buena que merecía ser, pero seguro que el buen ojo de la gente de Sitges servirá para que muchos se planteen el darle una oportunidad a una cinta que no decepciona.