Hoy mismo llega el momento de cerrar el año cinematográfico en lo que a superhéroes se refiere. Marvel nos presenta a un nuevo personaje que se unirá a su universo cinematográfico con la intención de quedarse mucho tiempo. Sin la fama de Hulk, Spider-Man, Iron Man o Capitán América, el sensacional Doctor Extraño se presentará en nuestros cines con la firme intención de confirmar que es uno de los personajes más interesantes de cuantos han salido de la Casa de las Ideas. La empresa no es sencilla, ya que hablamos de un superhéroe llamado a quedarse mucho tiempo con nosotros.
Además de su previsible saga monográfica, Doctor Extraño ocupará un papel fundamental en las dos películas de Vengadores: Infinity War, así como en la Fase 4 del universo cinematográfico de Marvel. Estos parecen suficientes motivos como para conocer, más a fondo la historia de un Doctor Stephen Strange al que Benedict Cumberbatch pondrá rostro duranrte los próximos años.
El Dr. Stephen Strange (Benedict Cumberbatch) es un médico especializado en neurocirugía, tan codicioso como egocéntrico. Cuando una enfermedad nerviosa en sus manos le obliga a retirarse tras un accidente, todo su universo se ve sacudido. Su desesperación encuentra consuelo en la leyenda de la existencia de El Anciano. Él podía curar sus manos con magia, pero El Anciano le prometía ayuda a cambio de demostrar que era una persona merecedora de ella. Pese a su escepticismo inicial, Strange va abrazando las artes místicas hasta convertirse en el aprendiz de El Anciano. El tiempo le convertiría en maestro en las artes mágicas. Strange volvía a su ciudad como una persona renovada y un superhéroe de poder inimaginable encargado de defender al mundo de amenazas interdimensionales. Volvía como Doctor Extraño.