Nuestro segundo viaje intergaláctico de la mano de Disney ha sido toda una experiencia. El primero de los tres spin-off anunciados por la compañía del ratón lograba el favor de crítica y público. No es para menos, ya que la propuesta de Gareth Edwards resultaba enormemente atractiva y nos llevaba por caminos todavía inexplorados y ajenos a la Fuerza.
Así, el grupo de contrabandistas/rebeldes encargados de robar los planos de la Estrella de la Muerte se hacían con un lugar de honor entre los millones de fans de la saga galáctica. Lo que no sabíamos es que la cosa iba a ser bien diferente…
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“Pensábamos que no nos dejarían, pero Kathy [Kennedy, presidenta de Lucasfilm] y todos en Disney dijeron «Sí, tiene sentido. Supongo que tienen que morir porque no están en ‘Star Wars: Episodio IV – Una nueva esperanza’»”. Así de sincero se mostraba Gareth Edwards en una reciente entrevista concedida a Empire. El director de la cinta confesaba que la intención inicial era la de que todos los personajes sobreviviesen, ya que no creían que Disney fuese a permitir un final tan dramático como el visto en salas. Sin embargo, parece que la compañía decidió dar una absoluta libertad creativa al respecto, permitiendo que se rodase el final visto y en el que todos nuestros protagonistas acaban sacrificando sus vidas en pro de la libertad de la galaxia.