Algo oscuro hay en la mirada de Luke Skywalker. El tiempo ha hecho mella en el Jedi más emblemático de la historia, lo que parece haber fructificado en la búsqueda de una vía de la Fuerza a medio camino entre la luz y la oscuridad. su frase de “Los Jedi tienen que desaparecer” parece indicar que el rumbo tomado por Luke conduce a una búsqueda del equilibrio en la galaxia, lo que se lograría terminando con las dos caras enfrentadas de la misma moneda. De hecho, esta forma de pensar podría haber sido la causa de que Kylo Ren se le fuese de las manos.
Uno de los detalles fundamentales de cara a ese flirteo con el lado oscuro que mantiene Luke se pone de manifiesto en el colgante que el personaje llevará al cuello en Star Wars: Los últimos Jedi. Tal y como informa una fuente tan fiable como Making Star Wars, el mismo estaría coronado por un cristal Kyber del sable de luz de Darth Vader. Como no, el color del mismo sería el rojo.
Como muchos ya sabréis, los cristales Kyber son el material a partir del que se construyen los sables láser. Del mismo modo, el rojo suele ser sintomático de un dueño Sith o Jedi oscuro, como queda de manifiesto en los de Darth Vader, Darh Maul, Darth Sidious o Kylo Ren. En cualquier caso, seguro que el próximo 15 de diciembre salimos de dudas respecto al camino de la Fuerza perseguido por Luke.