Se está llevando palos por parte de todos los sectores de la crítica americana. Los Vigilantes de la Playa se plantaba en las carteleras con la firme intención de convertirse en uno de esos filmes ligeros y divertidos que tanto abundan con la llegada del calor. Además, la buena impresión que dejaban sus avances hacía pensar que podría ser una de las grandes sorpresas del verano. Nada más lejos de la realidad…
Con un lapidario 81% de críticas negativas, la cinta de Dwayne Johnson se veía lastrada en su estreno por los malos comentarios por parte de la prensa especializada. Sin embargo, el público que decidía otorgarle una oportunidad al filme quedaba más que satisfecho. Hasta un 70% del público le daba su visto bueno a Los Vigilantes de la Playa en Rottentomatoes, la misma plataforma que la masacraba.
Así las cosas, el enésimo debate sobre la desconexión entre crítica y público vuelve a salir a la palestra. El propio Dwayne Johnson lo alimentaba hace días con unas declaraciones en las que afirmaba haber asistido a pases de prensa en los que oía carcajearse a críticos que luego masacraban al filme.