Tarde o temprano, los camino de Christopher Nolan y James Bond se cruzarán. El hombre capaz de despertar el aplauso de la crítica y de romper las taquillas al mismo tiempo se ha convertido en el gran objetivo de los responsables de la saga del agente más famoso de la historia del cine. Después de las dos películas de Sam Mendes, muchas son las incógnitas que flotan en el aire, la mayoría de ellas relacionadas con la continuidad del sensacional Daniel Craig.
Muchas eran las informaciones que apuntaban a que Nolan se haría cargo de la nueva cinta de James Bond, pero la realidad es que el director parece tener clara su condición primordial para fichar por el filme. Un requisito que se antoja de lo más complicado de cumplir y que no convencerá demasiado a los fans.
“He hablado a lo largo de los años con la productora Barbara Broccoli y el productor Michael G. Wilson. Me encanta el personaje, me gusta ver qué hacen con él. Quizá un día podría funcionar. Tendría que ser necesario, si sabes a lo que me refiero. Tendría que necesitar reinventarse, tiene que necesitarte a ti.”
Se puede decir más alto, pero no más claro. Como ya ocurriese con la saga de Batman, Christopher Nolan quiere la completa libertad para configurar a un nuevo James Bond, lo que eliminaría de la ecuación a Daniel Craig. ¿Quién ganará el pulso?
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