SPOILERS del 7×04 de Juego de Tronos
Se antoja difícil encontrar las palabras exactas para describir lo que Juego de Tronos está logrando en su penúltima temporada. Durante muchos episodios, la gloriosa ficción de la HBO nos demostraba que era una serie de gran calibre, pero ahora comenzamos a sentir que todo ha sido sembrar con la intención de que germinase un final de serie a la altura del fenómeno ante el que estamos.
Efectivamente, acabamos de superar el ecuador de la séptima temporada y lo hemos hecho con un capítulo absolutamente brutal. Cada paso de los personajes durante cinco temporadas nos conducía a una sexta tanda de episodios que ya subía sus prestaciones considerablemente, pero que ahora consigue alcanzar la excelencia.
Después de hacer una importante criba de personajes, todos y cada uno de los habitantes de los Siete Reinos que habían atraído nuestra atención a lo largo de todo este tiempo cruzan sus caminos. Ya no tenemos mil tramas o hilos argumentales distintos. Esas personas a las que hemos acompañado por sus siempre difíciles periplos están llegando a los mismos puntos, lo que alcanzaba su máxima expresión en el 7×04.
Efectivamente, todo el mundo está con quien debe estar. La nómina de reencuentros soñados llega a su fin, de modo que ahora solo restan los duelos. El primero de ellos ha sido descomunal: Daenerys contra Jaime. El resultado no era otro que uno de los mejores instantes de la serie y quince minutos finales de excepción para un capítulo descomunal.