Partamos de la evidencia de que se trata de una de las películas más controvertidas que se recuerdan. Desde su estreno en el pasado Festival de Venecia, Madre! se ha convertido en centro de la polémica. Amada y odiada a partes iguales, lo cierto es que el filme de Darren Aronofsky está dando para todo tipo de interpretaciones (o ausencia de ellas). Por eso, hoy hemos querido arrojar un poco de luz sobre el asunto.
SPOILERS de Madre!
Lo que ocurre en esa casa tiene tela… El director, al hablar al respecto, afirmaba: “Quería hacer una película desde el punto de vista de nuestra madre y no creo que la historia de nuestro viaje con nuestra madre haya terminado, así que este es un cuento de advertencia así como un reflejo”. Así no salimos demasiado de dudas, pero vayamos por partes.
Vista Madre!, parece claro que existe un análisis profundo del proceso creativo en sus vertientes más profundas. La cinta nos acerca, en forma de metáfora, al sufrimiento y desgaste propios de quien construye. ¿Y cuál es la mejor vía para cargarlo todo de simbolismo? Pues apostar por un reflejo con el creador más emblemático de la historia: Dios.
Dios (Bardem) crea a la madre naturaleza (Lawrence). Del mismo modo, Adan (Ed Harris) entra en escena como el primer hombre/personaje. A partir de una costilla suya (esa herida en su espalda), crea a una Eva (Michelle Pfeiffer) que lo adora, pero que no se aguanta a la hora de coger la manzana/ cristal. Ahí se cierra el Paraíso y saltamos a Caín y Abel. ¿No son suficientes las referencias Bíblicas? Pues al loro con la entrega de su hijo (Jesús) a los hombres, que terminan matándolo.
Así, Darren Aronofksy nos muestra, con su habitual estilo excesivo, el proceso que todo creativo sigue para dar con una obra artística a partir de los guiños constantes a la historia de la creación según la Bíblia. Eso o cualquier otra cosa, vamos.