La edad de oro que atraviesan las series de televisión parece no tener fin. Lejos de terminar, la prolífica producción de ficciones para la pequeña pantalla podría estar a penas comenzando. Puede sonar extraño, pero si nos fijamos en que cada vez hay más canales y plataformas en las que encontrar alojo, lo cierto es que la cosa cobra sentido. De hecho, la demanda de series por parte del público no deja de crecer. Se avecinan grandes tiempos.
Muchas eran las nuevas apuestas para el 2017. Todos los canales querían dar con su Stranger Things o su Westworld particular, pero lo cierto es que la BBC y FX parecían haber tomado la delantera con Taboo. La serie protagonizada por Tom Hardy y creada por este junto a su padre no deja de generar comentarios. Muchas son las alabanzas que se está llevando un producto que llegaba a nuestros hogares a principios de 2017.
Desgraciadamente, la grandísima apuesta creativa no era suficiente para conquistar al gran público. El proyecto más poderoso del año se quedaba sin el público esperado. No obstante, los que nos entregábamos a Taboo quedábamos prendados de una ficción gloriosa. De hecho, se hacían oficiales unas pérdidas de varios millones de dólares en el bolsillo personal de Tom Hardy, pero actor y cadena han decidido apostar por una segunda temporada. Taboo merece mejor suerte de la que ha tenido hasta ahora.