Nadie quiere verse relacionado con el tsunami más grande jamás visto en Hollywood. Desde que el caso de Harvey Weinstein y sus constantes casos de acoso salieran a la luz, la industria del cine y la televisión ha comenzado una cruzada contra los abusos de carácter sexual. Para sorpresa de todos, centenares de estrellas comenzaban a salir a la luz para denunciar a diversas personalidades importantes de la industria, lo que está causando estragos.
Uno de los casos más dolorosos es el que involucra a Kevin Spacey en un intento de abuso sexual a Anthony Rapp. El actor de Star Trek: Discovery denunciaba unos hechos ocurridos en 1986, cuando sólo tenía 14 años. Por aquel entonces, Spacey contaba con 26 y estaba borracho, lo que no ha impedido que su reputación haya quedado seriamente dañada.
La primera consecuencia es que Netflix ya ha anunciado el final de House of Cards. La exitosa serie dirá adiós justo al terminar su sexta temporada. Sin embargo, la intención de la plataforma no es otra que la de continuar paseando por las cloacas de la industria, ya que planea un spin-off centrado en la figura de Doug Stamper (Gene Kelly). Eric Roth será el guionista de un spin-off que podría aterrizar en nuestro hogares en 2018.