Puede ser la peor película de la historia del cine. Ese extraño individuo llamado Tommy Wiseau se marcaba, hace 15 años, esa desastrosa maravilla titulada The Room. Cierto es que el bueno de Tommy se dejaba más de seis millones de dólares de su propio bolsillo y que la cinta no había por donde cogerla, pero pronto empezaba a convertirse en un filme de culto. Capaz de generar carcajadas por doquier, James Franco tuvo la habilidad de adaptar todo aquel extravagante proceso a la gran pantalla, lo que le valía el Globo de Oro a Mejor Actor en Comedia o Musical.
Efectivamente, el genial actor subía al escenario junto a su hermano Dave, co-protagonista de la enorme The Disaster Artist. Inmediatamente, James Franco llamaba a Tommy Wiseau al escenario, protagonizando uno de los momentos más divertidos de la noche. Y es que el director de The Room trataba de hacerse con el micro, hasta el mundo de que James Franco se veía obligado a apartar a un tipo indescriptible. Atentos al momentazo.