Parece mentira que ciertas cosas ocurran en nuestro mismo mundo. En el año 1980, las vertientes más extremistas del Islam cerraban los cines de toda Arabia Saudí. Efectivamente, mucho ha llovido desde entonces. Y es que, durante casi 40 años, el séptimo arte era prohibido en un país donde no pocas libertades decaen en pro de una corrupta interpretación religiosa.
Afortunadamente, esos tiempos prometen ir quedando atrás. Según acaba de saberse, el centro cultural de la ciudad de Yeda ha sido el primero en apuntarse al paso dado por el Ministerio de Cultura del país, programando un pase doble de dos películas con las que se rompía la prohibición: Emoji: La película y Capitán Calzoncillos. Efectivamente, se apostaba por dos productos infantiles para el retorno del cine al país. Sin embargo, teniendo en cuenta lo infame de Emoji: La película, no nos extrañaría que se tratase de una estrategia para espantar al público.
Bromas aparte, lo cierto es que el Ministerio de Cultura de Arabia Saudí ya ha comenzado a emitir las primeras licencias para la apertura de cines, lo que podría cristalizar en las primeras salas de exhibición permanente a partir del próximo mes de marzo.