El mundo de las series de superhéroes siempre recordará la relación que lo cambió todo. Hace unos años, el cine de superhéroes comenzaba a despuntar en la gran pantalla. Los personajes de las viñetas rompían su mala reputación y empezaban a convertirse en reclamo para llenar las salas de todo el mundo. Sin embargo, las series de televisión del género seguían sin despuntar.
Así estaban las cosas cuando Marvel y Netflix decidieron unir sus fuerzas. Daredevil pronto se convertía en un exitazo. Jessica Jones, Luke Cage, Iron Fist o The Punisher se les iban uniendo. La sociedad era perfecta, pero llegaba entonces el punto de fricción.
Como todos sabemos, Marvel Studios es propiedad de Disney. La compañía del ratón trataba de comprar Netflix el pasado año, pero se encontraban con la puerta cerrada a cal y canto. Automáticamente, Disney preparaba su propia plataforma de streaming, que verá la luz muy pronto. Ese será el lugar en el que nos encontraremos a los próximos superhéroes televisivos de Marvel. Cierto es que las series ya comenzadas en Netflix continuarán de la misma forma, pero se acabaron los estrenos de nuevas ficciones de superhéroes de Marvel en Netflix.
Gracias a dios, por que de todas la unica rescatable es Daredevil.