Esto ya no hay quien lo levante. Salvo que tengan un as escondido en la manga, parece que The Walking Dead no tendrá una vida larga. Cierto es que los responsables de la serie ya han anunciado la renovación de la misma. De igual modo, la realidad es que tiene nueva showrunner para la novena tanda de episodios. Sin embargo, el cambio ha de ser radical para conseguir reconectar a una audiencia que parece haber abandonado el barco por completo.
La cifra de 6,8 millones de espectadores y el 2,9 de puntuación en audiencia conseguida con el episodio 8×10 ha sido un brutal golpe para la ficción. En la que debía ser su temporada más espectacular, ese afán por perderse entre tramas irrelevantes y personajes sin dimensiones ha llevado a que la serie firme el segundo peor dato de su historia, solo por detrás de los 5,56 millones de espectadores y el 2,8 de puntuación logrado por el quinto episodio de la segunda temporada. Un auténtico desastre.
Así las cosas, la realidad es que solo un milagro podría hacer que The Walking Dead alcanzase su décima temporada.