Sabíamos que Fast & Furious 8 tendría un buen puñado de atractivos, pero lo que jamás habríamos imaginado es que estábamos a punto de asistir al nacimiento de una de esas parejas artísticas llamadas a darnos años de disfrute. Efectivamente Hobbs y Deckard se han convertido en una auténtica mina de oro. La relación entre los personajes de Dwayne Johnson y Jason Statham lograba convertirse en el el gran centro de atención de la película, lo que no pasaba desapercibido para nadie. El amor-odio entre ambos tipos ya nacía con su pelea en el anterior filme, pero ahora alcanzaba niveles épicos gracias a las descomunales dosis de humor en cada una de sus interactuaciones.
Así las cosas, no es de extrañar que los responsables de la motorizada saga decidiesen empezar a trabajar en un spin-off con ambos personajes como protagonistas. Fast & Furious sigue siendo la mar de rentable, pero ya sólo quedan dos películas para cerrar la franquicia. Y lo de Hobbs y Deckard es todo un filón.
El 26 de julio de 2019 llegará a los cines de todo el planeta una película que, por si no tuviese los suficientes atractivos, ahora acaba de confirmar el fichaje del genial David Leitch como director. Efectivamente, el responsable de John Wick y de Atómica se convierte en la mejor de las elecciones posibles para una película que tiene pinta de molar un mundo.