Al fin quedó atrás la era de la infamia televisiva española. Después de varios años pidiendo un salto de calidad como el visto en medio mundo, la ficción patria ha empezado a lanzarnos una joya tras otra. La llegada de Netflix y HBO así como el sensacional trabajo de Movistar+ han sido determinantes para que esto se produzca. Y precisamente esta última es la responsable de esa joya llamada El día de mañana.
Justo Gil, un joven inquieto y lleno de ambiciones, llega como un inmigrante más a la próspera y prometedora Barcelona de los 60, sin nada en los bolsillos y dispuesto a convertirse en un hombre de éxito. La ciudad, en pleno viraje hacia la modernidad, parece sin duda el lugar ideal para ello: un oasis de libertad, posibilidades y futuro en mitad del páramo del franquismo. Basada en el libro homónimo de Ignacio Martínez de Pisón.
Aura Garrido, Javier Pla, Carra Elejalde, Jesús Carroza y Pere Ponze son los rostros de una miniserie de seis capítulos que acaba de plantarse en nuestros hogares como un auténtico torbellino. Ritmo del bueno, una estructura sensacional y una puesta en escena gloriosa hacen de El día de mañana una de esas paradas imprescindibles para cualquier seriéfilo. La Casa de Papel, La Peste, Fariña… ¡Qué el ritmo no pare!