Parece que Debra Granik lo ha vuelto a hacer. Probablemente el nombre de la directora no os suene demasiado, pero conviene recordar que esta mujer es la responsable de una de las mejores cintas independientes de la última década: Winter´s Bone. Su mano para las pequeñas grandes historias es más que evidente, sobre todo si recordamos aquel glorioso debut con Down to the Bone (2004).
Ahora, tras 8 años alejada de la ficción, la directora se ha lanzado con un filme que, según los que ya han podido disfrutarlo, es de lo mejor del año. Y es que bajo el título de Leave no Trance se esconde una película que llegará a las carteleras americanas el próximo 29 de junio y que ha logrado la friolera de un 100% de valoraciones positivas en Rotten Tomatoes.
Un padre y su hija de 13 años viven una vida paradisíaca en un parque enorme de Portland, Oregon, hasta que un pequeño error complica sus vidas para siempre. Así se presenta una película protagonizada por el inmenso Ben Foster y en el que la pequeña Thomasin McKenzie se luce a lo grande. Al loro, porque así luce Leave no Trance, la cinta llamada a convertirse en la pequeña gran joya de este 2018.