Pocos pueden cuestionar el hecho de que Birdman es una de las películas más geniales de los últimos tiempos. Alejandro González Iñárritu, con la complicidad de Michael Keaton y compañía se sacaba de la manga una obra imperecedera y agriamente satírica que lograba conquistar a crítica y público sin excepción. Tanto es así, que la película podría convertirse dentro de dos semanas en la ganadora del Oscar (si Boyhood no se lo impide). Todo ello a pesar de su controvertido final, que ha generado más de una discusión. Lo que no sabíamos es que el final redactado por los guionistas tenía prevista otra secuencia de cierre, tal y como ha confesado Alex Dinelaris, uno de los autores del libreto.
Spoiler:“Teníamos otro final que era satírico. El otro final era que se dispara a sí mismo en el escenario. La cámara muestra al público que está ovacionando de pie, la cámara daría la vuelta hacia el escenario y se produciría una elipsis y veríamos a James Lipton o Charlie Rose y a Michael Keaton, que estaría leyendo la reseña de la obra. Diría, ‘Oh dios mío, has recibido una crítica increíble’ y Michael daría la razón. Entonces la cámara merodearía como durante toda la película, iría a la parte de atrás del escenario y a través de los pasillos y llegaríamos al camerino, donde Johnny Depp estaría sentado mirando al espejo y poniéndose su peluca de Riggan Thompson y el póster de Piratas del Caribe 5 estaría en la parte de atrás. En la voz de Jack Sparrow se escucharía, ‘¿Qué coño estamos haciendo aquí, tío?’ Iba a ser la sátira en bucle sin fin.” Comentaba Alex Dinelaris en el programa de Jeff Goldsmith.
Finalmente no se pudo conseguir ni a Johnny Depp ni el póster, pero no habría estado nada mal ese final con un Depp luchando contra la voz interior frente al mismo espejo que acompañaba a Michael Keaton.
Un final, que de haber visto la luz habría sido estupendo también.