Es uno de los más grandes, Más de cinco décadas ante las cámaras y decenas de películas son la carta de presentación de Michael Caine. El actor británico ofrece una clase de interpretación cada vez que se pone delante de las cámaras, siendo considerado un auténtico maestro por todos sus compañeros de profesión. Por eso jamás habríamos imaginado que alguien podría impresionar lo suficiente a un actor de semejante empaque, como para lograr que no le saliese el habla.
Según ha confesado el propio Michael Caine, la única vez en su carrera que no fue capaz de decir ni una palabra fue en el rodaje de El Caballero Oscuro (2008). El veterano actor daba vida de forma brillante a Alfred en la trilogía de Christopher Nolan, convirtiéndose en uno de los grandes trabajos de su carrera. Sin embargo, la aparición en escena de un joven actor llamado Heath Ledger conseguía noquearlo.
Al parecer, tan abrumado se quedaba Michael Caine en su primera escena en compañía del Joker, que las palabras no le salían de la boca. Las frases de Alfred no brotaban y la escena tenía que repetirse en una anécdota que el bueno de Michael Caine ha relatado en más de una ocasión y que demuestra que el impacto de aquel Joker igual en rodaje que en la calle.