Cuando parecía que la cosa no podía mejorar, resulta que llega la tercera temporada de Daredevil y nos vuelve totalmente locos. El mejor “retoño” de la asociación entre Marvel y Netflix se estaba haciendo esperar y nuestra paciencia se agotaba. Por suerte, el aterrizaje de esta nueva tanda de episodios ha conseguido que nos olvidemos rápidamente del largo periplo por el desierto que pasamos todos los fans.
volvemos a disfrutar de grandes dosis de oscuridad, de un personaje construido a las mil maravillas por Charlie Cox y de una trama que, para esta ocasión, encuentra cierta inspiración en la línea de Born Again. Todo buenas noticias para el regreso de un Matt Murdock que terminaba la anterior temporada bastante fasdidiadillo.
Así las cosas, Daredevil vuelve a recordarnos que es la mejor serie de superhéroes de la historia de la televisión.