Ni los más optimistas esperaban semejante exitazo. Pese a la enorme expectación despertada por Venom en los meses anteriores a su estreno en salas, la recepción por parte de la crítica no era nada buena. De hecho rozaba el desastre. Así, la película aterrizaba en salas con más dudas que otra cosa. Nadie vio venir el descomunal fenómeno.
La respuesta del público no se hizo esperar: Venom se estrenaba arrasando. El filme encandilaba a los espectadores de todo el mundo, provocando que los millones cayesen a lo bestia en las arcas de Sony. De hecho, el filme lograba datos mejores que cualquier cinta de Spider-Man (no ha superado a Spider-Man: Homecoming, pero sus costes han sido casi de la mitad) y pulverizaba las cifras de todos los estrenos del universo DC.
A día de hoy, con su vida comercial cerca de llegar al final, Venom ha conseguido unos impresionantes 850 millones de dólares en todo el planeta. Lo más flipante es que la película costaba 100 millones, la mitad de lo que se viene invirtiendo en películas de superhéroes. Hay Venom para rato.