Cuando te lanzas con un filme como Predator, es más aconsejable jugársela que causar irrelevancia. Ese era el plan inicial de un director al que le ordenaron cambiarlo todo cuando ya había terminado la filmación . Pese a que las expectativas eran elevadas, la Predator de Shane Black nos dejaba realmente fríos. De hecho, su primera mitad no era ninguna maravilla, pero mantenía perfectamente las formas. El desastre llegaba en un tramo final que Fox obligaba a cambiar a Shane Black a base de reshoots que modificaban por completo el desenlace de la película.
Había Depredadores de nuestro lado. Efectivamente, la película introducía a dos depredadores buenos que se enfrentaban, junto a nuestro grupo de protagonistas, a esa bestia parda que veíamos en el montaje final. Cierto es que la idea suena bastante extraña, pero lo cierto es que se antoja difícil que pudiese empeorar lo que vimos en las salas de cine.
Ahora, con este vídeo detrás de las cámaras, lo que hemos descubierto son los diseños de esos emisarios buenos de los Predator, así como de algunos híbridos de lo más interesantes y que también desaparecieron del montaje final. Una pena.