8. Winchester: La casa que construyeron los espíritus: Tenía toda la pinta de resultar la gran cinta de terror del año, pero nada más lejos de la realidad. Más que maluca una película con algún susto como única aportación a la causa. No hay tensión y la historia está realmente desatendida en una cinta que, sobre el papel, apuntaba a pepinazo. Ni Hellen Mirren es capaz de salvar los muebles en este desastre.
7. Pacific Rim: Insurrección: Esperábamos mucho, pero la cosa se quedó en decepción absoluta. Nada del encanto de la cinta original de Guillermo del Toro. Esto parecía una película de Transformers… y de las malas. Nadie recordará la segunda entrega de Pacific Rim más que por su decepción económica, creativa y por haberse cargado las opciones de continuidad de la saga y su prometedor futuro.
6. Ocean´s 8: Puede que no sea la peor película de la lista, pero sí la más decepcionante. Y lo es porque hay que pifiarla mucho para que un reparto de este calibre termine desperdiciado. Cate Blanchett, Sandra Bullock, Anne Hathaway, Helena Bonham Carter, Sarah Paulson… Imposible más talento, pero la realidad es que estamos ante una película en la que no pasa absolutamente nada. Carente de clímax o crestas dramáticas, el filme no podría resultar más olvidable,
5. Han Solo: Una historia de Star Wars: Estaba llamada a ser uno de los grandes taquillazos del año, pero ha terminado por resultar un batacazo de lo más inesperado. Ya no solo es la primera película de Star Wars que no ha arrasado, sino que encima se ha comido una leche legendaria. Para colmo, el trabajo de Ron Howard a los mandos del proyecto da como resultado un filme carente por completo de encanto.