Al fin llega el momento. Tras un par de años marcados por constantes retrasos, Alita: Ángel de combate al fin se plantará ante el gran público. La película de Robert Rodríguez llega precedida de horribles sensaciones a causa de sus demoras, pero también de unos comentarios bastante entusiastas por parte de muchos de los que ya han podido verla. ¿De qué lado caerá la pelota finalmente?
El próximo 15 de febrero es el momento de que el público ofrezca su veredicto. Estos últimos días nos hemos ido encontrando con una sorprendente polarización entre la crítica. Así, hay quienes han quedado encantados, pero también muchos detractores de la cinta. De hecho, las opiniones prácticamente se dividen al 50%. Eso sí, todo sera irrelevante cuando el público empiece a hablar. Ahí será cuando veremos si Alita: Ángel de combate es un éxito o un fracaso.
¿Qué es Alita: Ángel de combate? Cuando Alita (Rosa Salazar) se despierta sin recordar quién es en un mundo futuro que no reconoce, Ido (Christoph Waltz), un médico compasivo, se da cuenta de que en algún lugar de ese caparazón de cyborg abandonado, está el corazón y alma de una mujer joven con un pasado extraordinario. Mientras Alita toma las riendas de su nueva vida y aprende a adaptarse a las peligrosas calles de Iron City, Ido tratará de protegerla de su propio pasado, mientras que su nuevo amigo Hugo (Keean Johnson) se ofrecerá, en cambio, a ayudarla a desenterrar sus recuerdos. Cuando las fuerzas mortales y corruptas que manejan la ciudad comienzan a perseguir a Alita, ella descubre una pista crucial sobre su pasado: posee habilidades de combate únicas que los que ostentan el poder querrán controlar a toda costa. Sólo manteniéndose fuera de su alcance, podrá salvar a sus amigos, a su familia y el mundo que ha aprendido a amar.