Las expectativas siempre son algo difícil de gestionar. Después de las dos primeras entregas de Terminator, millones de fans quedaban para siempre enamorados de la saga. El problema es que también se marcaba una frontera plagada de desolación en su otro lado. Tres nuevas películas nos hemos encontrado desde entonces y ninguna ha estado ni remotamente a la altura de lo esperado. Más de 25 años de secuelas decepcionantes.
Así las cosas, conviene ser conscientes de que jamás volveremos al nivel de las dos primeras películas, pero razones sobran para pensar que Terminator 6 superará sin problemas el nivel de las tres últimas entregas.
Lo que no nos ha gustado, no ha existido. Cierto es que estamos ante la sexta entrega de la saga, pero la película se plantea como la tercera película que debió ser. el filme enlazará directamente con Terminator 2, lo que pone un poco de orden en todo el asunto. Así, Arnold Schwarzenegger (T-800) y Linda Hamilton (Sarah Connor) continuarán donde lo dejaron.
Un detalle fundamental del filme es que James Cameron vuelve a estar al frente. Cierto es que no se encargará de la dirección, pero el padre de la saga ha vuelto para hacerse cargo de la historia y la producción. No había rastro de él desde la segunda entrega, pero los derechos han vuelto a su mano y su implicación emocional con su “bebé” es indudable. Su sello siempre es garantía de éxito y ha trabajado codo a codo con el director. No puede salir mal.
Por si no fuese suficiente con todo esto, el hecho de que Tim Miller sea el que se sienta en la silla de director ya dispara nuestra emoción. El director de Deadpool es un fenómeno y la enésima razón para creer que Terminator 6 será una de las mejores entregas de la saga.