Nunca vamos a cansarnos de insistir en que el talento de esta mujer será recordado durante décadas. Amy Adams es una actriz excelsa. Cada vez que le cae un papel entre manos, el resultado es un ejercicio interpretativo brillante. Poco importa el tipo de personaje, ya que todo lo hace bien esta mujer. Sin embargo, parece que el mundo se resiste a reconocer sus infinitos méritos.
Ha sido su sexta nominación al Oscar la de este año. Todas ellas han terminado sin feliz desenlace. Rondando los 45 años, la genial Amy Adams está a solo una nominación de Glenn Close de convertirse en la intérprete con más candidaturas a los Premios de la Academia y sin ninguno en su haber. Eso sí, la diferencia con Glenn Close es que esta tiene ya 72 años. Alguien debería ponerle freno a lo de Amy Adams, ya que al ritmo al que va perdiendo nominaciones podría pasar las 15 para esas alturas.
Lo que importa es el reconocimiento del público y el infinito talento que siempre pone sobre la mesa. Sin embargo, no estaría de más ir dándole un Oscar a Amy Adams que sería más que merecido. Ya no se hacen actrices así.