Una chica adolescente (Clara Rugaard) es criada en un refugio subterráneo por una madre robot que ha sido diseñada para repoblar la Tierra en caso de que se produjese una catástrofe. El vínculo entre ambas se ve amenazado cuando la joven deja entrar a una mujer desconocida y ensangrentada (Hilary Swank), que pone en tela de juicio todo lo que su madre robótica le ha enseñado sobre el mundo exterior. La chica tendrá que averiguar cuál de las dos dice la verdad para poder tomar una decisión con respecto a su futuro.
Teníamos la sensación de que no iba a funcionar demasiado bien, pero lo cierto es que ha sido una gran sorpresa. I am mother llegaba a la perrilla de Netflix hace unas semanas. Cierto es que la plataforma de streaming llevaba tiempo apostando por la ciencia ficción con sus producciones propias. Sin embargo, la mayoría de ellas se habían estrellado a lo grande. Algo que ha quedado lejos de ocurrir con I am mother.
No diremos que es una obra maestra, pero negar el interés de I am mother sería ridículo. La película tiene unos cuantos pasajes e ideas realmente interesantes. Además, se desarrolla con cierta audacia. De hecho, se queda a poco de ser una grandísima película. Hay algunas barreras que no se atreve a saltar cuando más lo pide la historia, pero eso no es obstáculo para que podamos hablar de una cinta indie de ciencia ficción realmente atractiva. Para colmo, nos reencontramos con Hilary Swank. ¿Qué más se puede pedir?