Hay películas que nacen con una capacidad fuera de lo común para llegarnos al corazón. Cintas inteligentes y con un encanto desmedido y en las que el nombre de Richard Curtis suele estar generalmente implicado guionista de maravillas como Cuatro bodas y un funeral y Notting Hill, su talento también quedaba de manifiesto como director de Love Actually o Una cuestión de tiempo. Así, el mero hecho de saber que era el guionista de Yesterday había conseguido disparar nuestro interés.
Un músico que lucha por abrirse camino se da cuenta de que es la única persona en el mundo capaz de recordar a los Beatles, una banda que no existe para el resto del planeta. Así, con las canciones de John Lennon y compañía, el chico se convierte en una descomunal estrella.
Con este argumento se presenta una cinta que tiene como director a nuestro queridísimo Danny Boyle (Trainspotting, Slumdog Millionaire) y que ya ha conquistado a crítica y público de medio mundo. Este viernes llega a nuestras salas uno de esos filmes que nos recuerdan por qué Richard Curtis es uno de los más grandes. Maravilla a la vista.