Hay intérpretes que son sinónimo de éxito. Los estudios se dan de leches por hacerse con esos nombres capaces de arrastrar a las salas a millones de espectadores. Rara es la ocasión en las que sus salarios no quedan ampliamente amortizados por asombrosas cifras de recaudación. Pero, entre todos ellos, hay un nombre que destaca.
No es la intérprete más conocida por el gran público. Tampoco llena las portadas de todo el mundo ni tiene un sueldo de esos que quitan el sentido. Sin embargo, nadie puede discutirle a Zoe Saldana que es la más rentable del planeta. Después de que Vengadores: Infinity War superase los 2.000 millones de dólares en taquilla y que Vengadores: Endgame haya terminado como el filme más taquillero de la historia, se ha convertido en la única intérprete con tres filmes por encima de la cifra en cuestión. Y es que estamos también ante la protagonista femenina de Avatar.
¿No os parece suficiente? Pues a todo ello hay que añadirle las películas de Guardianes de la Galaxia en las que da vida a Gamora, así como las de la saga Star Trek y proyectos menores. Está claro que Zoe Saldana es una auténtica mina de oro.