Han sido tiempos difíciles. Las tiranteces entre Marvel y Scarlett Johansson, lejos de atenuarse, se volvían cada vez más intensas. Pese a ser la mejor pagada después de Robert Downey Jr., parece que los 20 millones que la actriz se llevaba por enfundarse el traje de Viuda Negra ya no le compensaban. Scarlett quiere un salario más cercano al de un Tony Stark que suele embolarse más de 50 millones por película, algo a lo que la gente de Marvel nunca ha estado dispuesta.
El último punto de fricción llegaba con la cinta monográfica de Viuda Negra. Las dudas se multiplicaban ante un proyecto que nunca se confirmaba. La saga de Natasha Romanoff nunca lograba luz verde. Eso no gustaba nada a una Scarlett Johansson que no dudaba en declarar que las ganas de interpretar a Viuda Negra no le iban a durar para siempre.
Ante esta situación, Marvel decidía acabar con la vida del personaje en Vengadores: Endgame. La lucha contra Thanos se cobraba la vida del genial personaje. Desgraciadamente, la decisión se tomaba cuando las partes estaban de uñas. Sin embargo, el posterior acercamiento y el aumento de salario de la intérprete se traducía en la aprobación de un proyecto realmente raro como es el de la película de Viuda Negra, una precuela con el personaje ya muerto y que llegará en 2020. Raro, raro.