Es realmente sintomático. Pese a que todos mantenemos las esperanzas y la ilusión en que las cosas vuelvan a la normalidad, lo cierto es que la pandemia mundial del COVID-19 no parece que vaya a permitirlo muy pronto. Desde hace varias semanas se están detectando movimientos empresariales sintomáticos de que el camino a recorrer es todavía largo y arduo. Algo que acaba de quedar más que claro.
Los grandes estrenos cinematográficos del verano han desaparecido. Las grandes compañías se han cargado ya todas las citas importantes del verano. A excepción de la cinta de Christopher Nolan, Tenet (17 de julio), no queda película importante que todavía no haya desaparecido del calendario estival. Como mucho, Wonder Woman 1984 que ha pasado de junio al 15 de agosto. En cualquier caso, tiene pinta de que ambos filmes también darán el salto a finales de este mismo año, o incluso principios de 2021.
Viuda Negra, Morbius, James Bond, Mulan, Minions… Todas ellas están ya descartadas para este verano. Cuando se abran las salas, lo que no se espera en un futuro cercano, se testará la situación con estrenos modestos. Y es que nadie piensa que la normalidad en cines pueda volver hasta finales de este 2020. Veremos.