Como todo movimiento sano, lícito y necesario, cuando se lleva al extremo suele caerse en el absurdo. Efectivamente, tras la terrible muerte de Floyd a manos de un policía en Estados Unidos, se ha prendido una llama de lucha contra el racismo que promete dar un paso más de cara a exterminar esa lacra que todavía permanece arraigada en muchos lugares y personas. La sociedad ha reaccionado.
Desgraciadamente, uno de los grandes problemas a los que se enfrenta cualquier movimiento tan deseable como este es el de caer en el absurdo. Eso mismo acaba de ocurrir después de que HBO Max haya decidido eliminar Lo que el viento se llevó de su catálogo tras acusaciones de racismo. Efectivamente, una de las cintas mas brillantes de la historia del cine acaparaba criticas después de que John Ridley, autor del guión de Doce años de esclavitud, publicase una columna en Los Ángeles Times acusando al filme de “ignorar y romantizar alguno de los muchos horrores de la esclavitud”, además de otras muchas lindezas. Error habitual el de mirar al pasado a través de las gafas del presente.
En cualquier caso, la reacción inmediata de HBO Max ha sido la de eliminar de su catálogo la excelsa película ante las tormenta de críticas. Una maniobra que no deja de resultarnos difícil de comprender.