Es uno de los más grandes. El mundo del cine y de la cultura en general siempre tendrá que estar agradecido a Francis Ford Coppola. El tipo que firmó la trilogía de El Padrino, Apocalypse Now o Dracula de Bram Stoker siempre ha llevado una carrera curiosa. De hecho, parece que en los últimos 25 años no ha encontrado estímulo en el mundo del cine como para ir un poco más allá. Así, poco más que pequeñas e irrelevantes producciones son su legado en más de un cuarto de siglo.
Ahora, con ya más de 80 años, el viejo Francis ha decidido que es el momento de despedirse por todo lo alto. Le ha quedado una película por hacer y no quiere esperar ni un minuto más: “Va a ser algo extraordinario, una producción enorme con un reparto impresionante. Es la creación de una gran obra para la que pretendo emplear todo lo que he aprendido a lo largo de mi carrera, desde que comencé con el teatro a los 16 años. Será algo épico”.
Con estas palabras, el propio Francis Ford Coppola anunciaba el proyecto de Megalopolis, una cinta que empezaba a preparar en mayo del año 2001, pero que quedaba perdida en un cajón después de que los atentados del 11 de septiembre le impidiesen desarrollar la película en Nueva York, tal y como había previsto. Ahora solo falta saber de dónde saca los 100 millones que necesita para la película. Hace unas décadas no habría sido gran problema para Coppola, pero ahora el panorama es bien distinto.