Hoy nos vamos al peor día de uno de los directores más grandes de la historia del cine. El nombre de Steven Spielberg suele ser sinónimo de éxito. Cada nueva película del enorme director es capaz de llenar las salas de cine de todo el planeta. Drama, histórico, acción, aventuras, ciencia ficción, comedia… No hay género que se le resista al Rey Midas de Hollywood, pero esta vez parece que no ha habido conexión con el gran púbico.
Mi amigo el gigante es un auténtico fracaso. De hecho, se trata del tropiezo más importante de toda la carrera del director. Pese a ser un filme bastante agradable, lo cierto es que los malos presagios de su estreno han terminado por confirmarse. Incluso se podría decir que se han empeorado las peores perspectivas, ya que el filme cerraba su vida comercial sin tan siquiera cubrir los costes.
No es ningún desastre, pero la realidad es que es la cinta más flojita del director. Efectivamente, el bueno de Steven Spielberg no sabe hacer una película horrible. Eso sí, tampoco podemos pasar por alto el hecho de que un director de semejante calibre se saque de la manga una cinta tan irrelevante. Sin lugar a dudas, Mi amigo el gigante es su peor obra.