Los comienzos nunca son fáciles para nadie. En innumerables ocasiones nos hemos quedado de piedra al descubrir los primeros pasos o las profesiones de muchas de las grandes estrellas antes de alcanzar la cumbre. Si no, que se lo pregunten a Cameron Díaz.
Cualquiera que escuche hoy su nombre es capaz de ponerle rostro a una de las intérpretes más cotizadas de la industria. Desde su salto a la fama con La Máscara, lo suyo ha sido un idilio constante con la taquilla. Sin embargo, un par de años antes de unirse a Jim Carrey en la famosa película, su carrera lucía bien distinta. Y es que, a principios de los años 90, nuestra adorada Cameron Díaz lograba pagar sus facturas a base de trabajar en películas eróticas y cine porno.
Lo cierto es que la protagonista de Algo pasa con Mary nunca se marcó ninguna escena de sexo explícito y que, más allá de desnudos y alguna situación embarazosa, sus apariciones nunca fueron demasiado salvajes. Sin embargo, la cuatro veces aspirante al Globo de Oro comenzó su carrera de una forma de lo más curiosa…