Empiezan a llegar las primeras consecuencias. Como todo apuntaba, la primera sentencia contra Johnny Depp en relación a las acusaciones de violencia domestica de Amber Heard deja ver lo que todos sospechábamos: la carrera del actor está en grave peligro. Cierto es que la sentencia en cuestión ha sido tangencial a la causa entre los dos intérpretes, pero esclarecedora en todo caso. El diario británico The Sun llamaba a Johnny Depp “pegaesposas”, ante lo que el actor reaccionaba con una demanda por difamación. El juez llamaba a declarar a Amber Heard, buscando esclarecer si el diario había faltado a la verdad. Lo que se encontraba eran durísimas declaraciones.
Hace días, la sentencia quitaba la razón a Johnny Depp. El actor perdía el juicio y, de hecho, la sentencia le daba un palo monumental: “El artículo, afirmando que Amber Heard ha sido víctima de violencia domestica, es sustancialmente veraz”.
Si Johnny Depp ya había perdido gran parte de encanto para con el público, ahora las cosas se ponen todavía más feas. Nadie quiere gastarse un pastizal contratado a un intérprete acusado de malos tratos, por lo que Warner le ha pedido educadamente que abandone la saga de Animales Fantásticos. En la misma, Depp interpretaba al temible Grindelwald, una de las grandes figuras. Sin embargo, el propio actor ha confesado que desde la compañía le pidieron que renunciase al papel y que él ha aceptado. Pintan feas las cosas para Johnny Depp...