Los experimentos del doctor Victor Fries para conservar la vida de su esposa con técnicas criogénicas originaron un error fatal que lo convirtió en Míster Frío, un villano que necesita mantener su cuerpo a temperaturas glaciales y que intentará congelar a todos los habitantes de la ciudad de Gotham. Además, la tímida botánica Pamela Isley se transforma en el transcurso de un experimento en la terrible Hiedra Venenosa que querrá asesinar a todos los seres humanos para que las plantas recuperen su hegemonía sobre la Tierra. Batman y su compañero Robin deberán enfrentarse a ellos para hacer fracasar sus siniestros planes.
¿Por donde empezar? Una buena opción sería comenzar por los “Batpezones” del “Bat-traje”. Tampoco estaría mal hablar de lo cutre de las “batescenas de acción” o de lo lamentable de los “Batvillanos” y la “Batestética”. El amigo Joel Schumacher se empeñó en darle un golpe mortal a “Batman” del que creímos que nunca se recuperaría hasta que Nolan obró el milagro.
A día de hoy nos sabe mal que un director tan sensacional como Schumacher sea recordado por tal patinazo. El responsable de Un día de Furia o Tiempo de matar era un director realmente bueno. Sin embargo, los horrores de sus dos películas de Batman y de Batman & Robin en espacial no dejaron de perseguirle hasta su fallecimiento en 2020. Un merecido homenaje a su trayectoria sería el de olvidar que un día ocurrió tal horror de cinta.