Puede que no sea para todos los paladares, pero nadie puede discutir que Raised by wolves es enorme. Si metemos ciencia-ficción y Ridley Scott en la misma frase, la emoción se apodera al instante de cualquier cinéfilo (o seriéfilo). Si a ello le añadimos el sello de la HBO, el resultado no puede ser otro que una maravilla.
Raised by Wolves era el titulo de una serie con la que el director de Alien, el octavo pasajero, Blade Runner o Marte regresaba a un terreno en el que siempre ha lucido esplendoroso. Una apuesta tan interesante como arriesgada.
Dos androides, denominados “Padre” y “Madre”, reciben la tarea de educar a un grupo de niños humanos en un misterioso y desértico planeta. A medida que las distintas colonias humanas comienzan a tener problemas a causa de sus diferencias religiosas, los androides descubren lo difícil que resulta controlar o incluso cambiar la opinión y las creencias de los seres humanos.
Televisión de la que vale oro y una de las series más brillantes de los últimos tempos. Es cierto que la prensa especializada se ha dado de tortas, ya que partidarios y detractores se contaban por miles. Tres cuartos de lo mismo ocurría con el gran público. Sin embargo, la realidad es que estamos ante una propuesta tan arriesgada como audaz. Una auténtica maravilla del género. Cada minuto de esta joya de la ciencia-ficción se paladea a lo grande. Y es que Raised by Wolves es de lo mejor que nos ha la pequeña pantalla en los últimos tiempos. Si no la has visto todavía, ya estás tardando, porque al fin ha llegado a HBO España tras meses de espera.