No han terminado muy bien. A pesar de que ya hace cuatro años que la relación entre Brad Pitt y Angelina Jolie llegaba a su final, lo cierto es que podríamos estar a las puertas del episodio más turbulento de su ruptura. La que fuese la pareja más ilustre y querida dentro de Hollywood ha iniciado una guerra en los tribunales. La razón no es otra de la custodia y manutención de los hijos de la pareja. El tema no era sencillo y los dos intérpretes mantenían un enorme pulso al respecto, pero la cosa se ha complicado gravemente después de que Angelina Jolie presentarse en el juzgado los documentos y pruebas para acreditar los supuestos abusos y la violencia doméstica ejercida por Pitt contra sus hijos y ella misma.
Mientras la justicia hace su trabajo para determinar la veracidad de las acusaciones vertidas, el pulso entre los dos actores continúa. Molesta con la petición de Brad Pitt de mantener la custodia de cada uno de sus hijos al 50%, Jolie incluso se ha ofrecido a declarar contra su ex pareja. Por su parte, desde el entorno del actor se habla de una campaña de desprestigio por parte de la madre para tratar de conseguir la custodia completa.
Sea como fuere, lo que está más que claro es que se trata de una situación de lo más desagradable. No han terminado bien las cosas en el universo Brangelina.