“Ahora escucha la historia de mi vida y de cómo el destino cambió mi movida. Sin comerlo ni beberlo llegué a ser el chuleta de un barrio llamado Bel Air. Al oeste en Philadelphia crecía y vivía sin hacer mucho caso al la policía…”. Ha vuelto a pasar. De nuevo hemos empezado un artículo de El príncipe de Bel-Air con la inolvidable sintonía de la serie.
Podrán pasar décadas y décadas, pero muchos somos los que seguimos recordando con una sonrisa en la boca la popular serie que arrancaba allá por 1990. Una auténtica leyenda de la televisión idolatrada por varias generaciones. Buena parte de la culpa de semejante exitazo la tenía una plantilla de actores espectaculares. Todos los personajes eran crema. Parece que Will (Will Smith) y Carlton (Alfonso Ribeiro) eran los únicos, pero nada más lejos de la realidad.
¿Os acordáis de la genial Hilary Banks? La actriz Karyn Parsons se salía dando vida a la mayor de los Banks. Incontables las carcajadas que pasamos en su compañía. Eso sí, sus múltiples esfuerzos en el mundo de la interpretación después de aquello nunca resultaron satisfactorios. No sería por no intentarlo, ya que eran muchas las series y películas en las que lograba pequeños papeles.