La noche más oscura es lo más parecido a la perfección cinematográfica que uno puede encontrarse. Pensaréis que es una exageración, pero no conviene caer en ese error. Os podrá o no gustar la temática, consideraréis acertado o no el enfoque, pero no cabe duda de que se trata de un ejercicio impecable.
Tras varios años de investigación de la CIA, que incluyó torturas a prisioneros en Afganistán, y gracias sobre todo a la perseverancia y decisión de la agente especial Maya (Jessica Chastain), por fin el presidente Obama dio el visto bueno a la operación militar que acabó con la vida de Osama Bin Laden, líder de Al-Qaeda. El título, (Zero Dark Thirty en su versión original), se refiere a la hora: las 00:30 de la madrugada del 2 de mayo de 2011, momento en que el comando SEAL de los marines penetró en la residencia de Bin Laden en Abbottabad, en Pakistán, para dar caza al hombre más buscado de la historia.
El manejo de los recursos narrativos de guionista (Mark Boal) y directora (Bigelow) es tan esplendoroso que resulta ofensivo para cualquiera que quiera dedicarse al oficio. Impecable fotografía, impecables interpretaciones (mención especial para esa enorme actriz que es Jessica Chastain) y un ritmo que introduce al espectador de manera brillante en ese retrato de una obsesión que es la película. Disponible en Netflix y Amazon Prime Video.