Corría el año 1989. Después de el éxito de “Superman”, el otro gran personaje del universo de DC Comics estaba cerca de ver la luz. Tim Burton era el encargado de llevar a la gran pantalla al célebre Bruce Wayne en una de las películas más esperadas del año. “Batman” comenzaba su rodaje con un reparto de lo más sugerente. Michael Keaton se quedaba con el papel del superhéroe, mientras que el enorme Jack Nicholson asumía el rol del mítico villano de Gotham: El Joker. Por si esto no fuese suficiente, la chica de la cinta era la mismísima… ¡Sean Young!
El rodaje de “Batman” arrancaba con la protagonista de “Blade Runner” en el papel de Vicki Vale. La cautivadora actriz iba para estrella después de su papel en la afamada cinta de Ridley Scott. El problema es que “Dune” (David Lynch, 1984) se convertía en un fracaso y papeles como el de “Wall Street” (Oliver Stone, 1987) no eran suficientes para reflotar su carrera. Con su fichaje para “Batman”, Sean Young sabía que tenía delante su gran oportunidad.
El rodaje de la película ya había comenzado. Young tenía que montar a caballo en la primera secuencia que rodaba. Durante una de las tomas, la actriz se iba al suelo y se rompía un brazo. Ni corto ni perezoso, Tim Burton despedía a la actriz y eliminaba la escena. La decisión del director no le sentaba nada bien a la actriz, pero ya nada podía hacer. A las pocas horas, Kim Basinger se convertía en la nueva Vicki Vale y Sean Young veía como se le escapaba la opción de volver a la cresta de la ola.