Uno de los mayores exitazos de la historia de la historia reciente de Netflix continúa. Los Bridgerton comienza en 1813 en Londres con Daphne Bridgerton (Phoebe Dynevor), la hija mayor de la poderosa familia Bridgerton, en su debut en el competitivo mercado matrimonial de la Regencia londinense. Con el ánimo de seguir los pasos de sus padres y encontrar el verdadero amor, las perspectivas de Daphne parecen inicialmente esperanzadoras. Pero todo empieza a desmoronarse cuando sale a la luz un diario repleto de escándalos sobre la alta sociedad escrito por la misteriosa Lady Whistledown que lanza calumnias sobre Daphne. La entrada en escena del rebelde Duque de Hastings (Regé-Jean Page), el soltero más deseado de la temporada, supone una válvula de escape para ambos, cuando deciden aliarse en una creciente batalla de ingenio para eludir las expectativas sociales sobre su futuro.
A pesar de nacer con la intención de ofrecernos una única temporada, el exitazo inesperado provocaba que Netflix le diese luz verde a una nueva tanda de episodios. Anthony (Jonathan Bailey) será el personaje alrededor del que girará una serie en la que compartirá protagonismo con Simone Ashley.
Los planes para Los Bridgerton son ambiciosos. Una precuela y varios proyectos relacionados con la serie ya están en marcha. En cualquier caso, todas nuestras miradas están situadas en una segunda temporada cuyo estreno ya tiene fecha oficial. Y es que en Netflix nos invitan a todos a un reencuentro con los Bridgerton el próximo 25 de marzo. ¿Logrará repetir el arrollador éxito de la primera temporada? Ya podéis apostar a que sí.